martes, 14 de febrero de 2017

OÍR Y ESCUCHAR


Como quien oye llover. Dios te oiga. Oye tú, ¿qué te crees? Oiga, ¿me permite una pregunta? Oído (es decir, enterado). Oyó las campanadas del reloj, eran las dos. No quiero oír una queja más. Oí un ruido espantoso. He oído que tienes novia. Oír, ver y callar. Se oyeron disparos. Como lo oyes. No oigo bien con este ruido. ¡Oiga usted!...

Así empieza este artículo de Javier Marías (¡Oigan!, El País Semanal, domingo, 12 de febrero de 2017) que aclara muy bien el uso de los verbos oír y escuchar que últimamente se emplean de forma incorrecta.

2 comentarios:

Luis dijo...

¡Qué bueno, qué articulo más interesante!

Inés dijo...

Grande Javier Marías! :)