jueves, 28 de septiembre de 2023

EL FRENTE DE GUADARRAMA. EL CERRO DE LA SEVILLANA

 


Continuamos visitando y estudiando vestigios de la Guerra Civil española en la sierra de Madrid. En este caso hablamos del frente de Guadarrama y del Cerro de la Sevillana. Recordamos que el paso por el Puerto del León tenía un gran valor estratégico porque controlaba la entrada a la capital de Madrid por carretera y por ferrocarril y por eso era un objetivo primordial para las fuerzas rebeldes.

Ya hemos hecho un artículo sobre Cerro Piñonero y Cabeza Lijar, en lo alto del puerto y otro sobre las trincheras de la Jarosa en una cota más baja. Ahora nos referimos al cerro de la Sevillana que controlaba el lado Este del puerto y se orientaba hacia La Peñota.

En este enlace podéis ver algunas fotos del campamento de La Sevillana.

A continuación tenéis todos los artículos publicados sobre la Guerra Civil:

El frente de Guadarrama. La Jarosa (octubre, 2017)

Somosierra. El frente del agua (octubre, 2017)

El cerro del puerco. La Granja (mayo, 2018)

Ruta de los búnkeres de Los Molinos (diciembre, 2019)

El penal de Bustarviejo (junio, 2021)

El frente de Brunete (Febrero, 2022)

El frente de Guadarrama. El Alto del León (abril, 2022)

Peguerinos y la Guerra Civil (junio, 2023)

El frente de Guadarrama. El cerro de la Sevillana (septiembre, 2023)


martes, 5 de septiembre de 2023

LA IGLESIA DE AUVERS, 1890

 


"También he realizado un cuadro grande de la iglesia del pueblo en el que aparece el edificio en tonos violetas, recortándose ante un cielo de un azul profundo, de un color puro; las vidrieras son como manchas de una tonalidad ultramarina, el tejado es violeta con una parte anaranjada. En primer plano, hierba verde con flores silvestres y una tierra rosada e inundada de sol. Se parece mucho a los estudios que hice en Nuenen del viejo campanario y el cementerio, sólo que el colorido aquí es más rico y expresivo". Vicent Van Gogh en Cartas a su hermano Teo.

Van Gogh (1853-1890) pasa las últimas semanas de su vida en Auvers-sur-Oise. Allí desarrolla una gran actividad y pinta a un ritmo frenético, casi un cuadro al día. Está en plena crisis y se acaba pegando un tiro. Cuando muere, el cura se niega a enterrarlo en el cementerio católico y, paradojas de la vida, gracias a la pintura de la iglesia el pueblo será mundialmente conocido.

La iglesia de Auvers. Auvers, junio de 1890. Óleo sobre lienzo, 94 x 74 cm. París, Museo de Orsay.

En el siguiente enlace se puede ver el proceso creativo de la copia.