EL HUEVO Y LA SAL

Seguimos trabajando con la materia, las mezclas y las reacciones químicas. Ahora queremos trabajar el concepto de densidad a través de un sencillo experimento. Años atrás trabajamos este tema de forma más sistemática, pero ahora hacemos sólo una aproximación.

1. MATERIAL

Necesitamos dos huevos, agua, sal, una cuchara y un vaso de precipitados.

2. ¿QUÉ HACEMOS

Echamos agua hasta los 200 ml.

Ponemos el huevo y vemos que se va al fondo del vaso.

Luego echamos sal en uno de los vasos (bastante sal)

Y volvemos a poner el huevo en el vaso que tiene sal (no se ve pero lo podemos probar y notamos que está muy salado...)

3. ¿QUÉ OCURRE?

El huevo no se hunde en el vaso que tiene sal. Es decir, flota.

Esto se debe a que el agua salada tiene más densidad y por eso el huevo flota. Es como si el agua se hiciera más densa, más espesa y entonces parece que el huevo pesa menos y flota.

Vemos en el libro que esto se llama densidad, que todos los cuerpos tienen densidad y que es un número que sale de dividir la masa de ese cuerpo (lo que pesa), entre el volumen que ocupa. Las unidades de densidad son kilogramo partido por metros cúbico, es decir, gramo partido por centímetro cúbico.