domingo, 28 de septiembre de 2014

VUELTA AL COLE: BIEN DORMIDOS Y BIEN DESAYUNADOS
























    
Al empezar un nuevo curso nos solemos encontrar con niños adormilados, que bostezan cada dos por tres y que pasan la mañana sin prestar mucha atención en clase. En este decálogo se señalan los puntos más interesantes que las familias deben tener en cuenta para afrontar con sus hijos la vuelta al cole.

1.     BIEN DORMIDOS.  Es importante que los niños duerman lo suficiente. El llegar a clase con la mente despejada y el cuerpo descansado permite que los niños atiendan y estén en disposición de aprender. Se estima que en edad escolar los niños tendrían que dormir 10 horas y los adolescentes ocho. Incluso hay estudios (IDIBGi, Instituto de Investigación Biomédica de Girona) que relacionan el dormir poco con la obesidad.

2.     BIEN DESAYUNADOS. El desayuno es una de las comidas más importantes del día. Hay que tener en cuenta que no hemos comido durante toda la noche y que el cuerpo necesita la energía del desayuno para empezar las actividades del día; si no lo hacemos, el cuerpo recurre a las reservas y estaremos adormilados durante la mañana. Es decir, tendremos falta de concentración y bajo rendimiento intelectual y físico. Por lo tanto es importante levantarse con tiempo y hacer un buen desayuno (leche, galletas y fruta). Más información en la web “En familia” de la Asociación Española de Pediatría (AEPED).

3.     FRUTA EN EL RECREO. Como la mañana es larga (de 9 a 2 de la tarde) es necesario comer algo a media mañana. Lo más adecuado sería una pieza de futa, un producto lácteo o un bocadillo, pero lo que hay que suprimir son los bollos industriales ya que tienen muchas grasas saturadas y, a la larga, provocarían problemas de colesterol y obesidad.

4.     EL NUEVO HORARIO. Después de un verano sin horario para dormir ni para levantarse, ni siquiera para comer, llega un nuevo curso y tenemos que adaptarnos. Para conseguirlo, unos días antes del comienzo de las clases, las familias deben volver a la rutina con los niños y establecer una hora para irse a la cama y para levantarse al día siguiente y rendir en clase sin bostezos.

5.     PREPARAR LA MOCHILA. La mochila se debe prepara el día anterior por la noche. Los padres deben ayudar a sus hijos y velar para que lleven los libros, los cuadernos y todo el material necesario. Es conveniente que los padres sepan el horario de sus hijos y tengan a mano un papel con las asignaturas que cursan cada día y así preparar todo lo necesario (chándal para Educación Física, flauta para Música, etc.)

6.     LAS ACTIVIDADES EXTRAESCOLARES. Para organizar el tiempo libre de la tarde muchas familias programan actividades. Es conveniente que estas actividades estén adecuadas a la edad de los niños, que les dejen tiempo libre para jugar y descansar y que no supongan una carga añadida a las tareas escolares (a veces los padres exigen demasiado a sus hijos en estas actividades). Para los menores de tres años es suficiente con jugar en el parque o pintar en casa; de tres a seis, la danza, la música o el dibujo ayudarán a desarrollar la expresión corporal y la creatividad; a partir de seis años el deporte en equipo ayudará a desarrollar la psicomotricidad y la coordinación y también a trabajar en grupo, a aceptar las normas y al esfuerzo. Sobre este tema es muy interesante el artículo “¡Usted no es su entrenador, es su padre!” de El País Semanal, nº 1982, del domingo, 21 de septiembre de 2014.

7.     LA TAREA ESCOLAR. Los padres deben acompañar a sus hijos en la tarea diaria que señalan los profesores. Hace falta que el alumno trabaje en casa, que prepare su material escolar (afile los lápices de colores, tenga a punto el material) y que repase y refuerce los contenidos trabajados en clase. No se trata de que los padres hagan la tarea de sus hijos si no de acompañarlos en ese momento y de valorar su trabajo.

8.     LO BUENO DEL COLE. El cole tiene muchas cosas positivas, los niños volverán a ver a sus amigos, conocerán a otros niños, aprenderán cosas, harán excursiones… Hay que transmitirles los aspectos positivos de la nueva situación y darles confianza y apoyo. El niño se está enfrentando a nuevas realidades para crecer y desarrollarse y necesita contar con sus padres.

9.     APOYAR Y QUITAR MIEDOS. No podemos transmitir nuestros miedos y nuestra ansiedad a los hijos, debemos crear momentos de conversación a lo largo del día (en la cena, por ejemplo) y escucharlos, responder a sus preguntas y generar confianza en ellos.

10.  ACOMPAÑAR EL PRIMER DÍA. El primer día de clase es especial, los niños estrenan libros y material y vuelven a ver a sus amigos del curso pasado. Es conveniente pasar este momento junto a ellos para transmitirles nuestro total apoyo. También es importante recogerlos al finalizar el día, mostrar alegría y preguntarles por las cosas que han hecho durante la mañana.

Elaborado a partir de “Consejos de tu farmacéutico”, número 175, septiembre de 2014. La fotografía es de Luis Magán y se publicó en EP el 3 de septiembre de 2007.


2 comentarios:

Zafonas dijo...

Qué buen decálogo! :)

Quien fuera tu hij@! ;)

Valentín Abalo Garea dijo...

¡Graciosa!