En el
laboratorio del colegio los profesores hemos recogido, a lo largo de los
últimos años, una serie de muestras que nos sirven para estudiar diferentes
temas. Es el caso de los huesos.
Ya hemos
indicado cómo estudiamos el cuerpo humano y el uso que hacemos de las maquetas
para estudiar los órganos internos (aparato circulatorio, aparato respiratorio,
aparato excretor) y los órganos de los sentidos (oído, vista, etc.).
Para estudiar
los huesos utilizamos muestras reales, huesos encontrados en el campo y que
hemos limpiado y desinfectado adecuadamente para usar en clase. Tenemos huesos
sueltos (fémur, omóplato, mandíbula, vértebras, etc.) y cráneos de diferentes
animales (oveja, carnívoros, aves, etc.).
Con los
alumnos y alumnas de 5º es la primera aproximación al tema y el objetivo es que
manipulen diferentes huesos para ver su forma, su tamaño y su textura. Más
adelante haremos deducciones para ver, por ejemplo, qué tipo de alimentación
tiene un animal a partir del estudio de su dentadura.
En un primer
paso nos centramos en dibujar del natural en el Cuaderno de Campo. Cada equipo
dispone de uno o varios huesos y debe dibujarlos (a veces a tamaño real y
usando el hueso como silueta). Dibujamos un fémur, una mandíbula, un cráneo, un omóplato y
una vértebra (más difícil).
Junto al
dibujo anotamos una explicación de los huesos. En este caso, el profesor escribe
en la pizarra y el alumno copia en el cuaderno (valoramos como muy importante
los datos que le queremos proporcionar al alumno y por eso no planteamos que el
alumno haga un resumen de lo explicado, si no que queremos que tenga el resumen
completo y exacto).
Este es el
resumen:
"Los animales que tienen huesos se
llaman vertebrados. Los huesos se unen entre sí mediante articulaciones.
Las articulaciones pueden ser fíjas,
móviles y semimóviles.
Las articulaciones fijas tienen los
huesos soldados y no se pueden mover. Por ejemplo, los huesos del cráneo, que
protegen al cerebro.
Las articulaciones móviles tiene los
huesos unidos por ligamentos y eso les permite muchos movimientos. Por ejemplo,
el codo, la rodilla y la muñeca.
Las articulaciones semimóviles sólo
permiten algunos movimientos. Es el caso de la columna vertebral y la mandíbula".
En la segunda
sesión de laboratorio seguimos estudiando los huesos pero ahora nos fijamos
especialmente en su forma y anotamos:
"El cuerpo humano tiene tres partes: la
cabeza, el tronco (tórax y abdomen) y las extremidades (piernas y brazos).
Al estudiar los huesos del cuerpo
humano se diferencias tres partes muy importantes: el cráneo (que protege el encéfalo),
la caja del tórax (que protege el corazón y los pulmones) y la columna
vertebral (que protege la médula espinal).
Según su función, los huesos tienen
diferentes formas:
- Huesos largos (en las extremidades): fémur, tibia…
- Huesos cortos (en algunas articulaciones): Huesos de la muñeca, del tobillo, etc.
- Huesos planos, como los del cráneo y los omóplatos.
- Huesos especiales: Vértebras, dientes, etc."
Para profundizar en el tema se puede ver este montaje sobre la exposición organizada en el laboratorio del colegio hace unos años y titulada Expohuesos.
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